Cómo establecer límites sanos
¿Que son para ti unos límites sanos?
Los límites saludables son aquellos que ponemos para cuidarnos y defendernos de todo lo que no nos hace bien. Es nuestra capacidad para decir “no” o “si” según nuestros valores personales.
Muchas veces es nuestro cuerpo, el que pone límites somáticos, que nos protegen de las pequeñas agresiones en nuestro día a día. El problema fundamental es que no siempre hacemos caso a esas señales. Porque ¿Cuántas veces sentimos una cosa y finalmente acabamos haciendo otra?
Saber decir "no" y establecer límites no es siempre fácil, puede resultar todo un reto, pero es muy necesario para sentirnos bien con nosotros mismos y con los demás.
Estos límites nos permiten decir que “no” sin violentarnos, sin gritar, sin “atacar” y culpar a los demás de nuestro propio malestar.
Para ello, es necesario aprender a determinar en qué momentos hay que negarse y en qué momentos hay que decir "sí" y aceptar las peticiones y demandas de otros.
De esta manera, aprenderemos a defender nuestros derechos y necesidades, sin perjudicar a nadie.
Si no aprendemos a poner límites saludables, sufrimos. Nuestra relaciones se pueden volver difíciles y muchas veces llenas de malentendidos y situaciones incómodas. Nos podemos llegar a sentir “maltratados”, vulnerables y despreciados.
A continuación os dejo algunos de los pasos que nos permitirán aprender a decir "No":
◇ Conecta con lo que sientes y con lo que quieres. Conectar contigo misma, escucharte, te va a ayudar a percibir lo que necesitas y deseas, y a saberlo diferenciar de aquello que no te hace bien o te daña.
◇ Revisa tus creencias y tus valores. Eres la única con poder de decidir sobre ti misma. Pregúntate: ¿Qué es lo verdaderamente valioso para mí?
◇ Atrévete a no gustar. A veces, las normas sociales nos atrapan y no nos permiten ser transparentes y mostrarnos tal y como somos. Traspasar estos convencionalismos limitantes nos puede ayudar a sentirnos más libres.
◇ La rabia y su lado sano. Haz de tu rabia, tu aliada. Cuando no dejamos salir de un modo sano esta emoción, cuando no la expresamos y la bloqueamos, se reprime y oprime, convirtiéndose en rechazo hacia nosotras mismas. Cuando esto ocurre, nos volvemos mucho más vulnerables e incapaces de decir que no o de pedir lo que necesitamos.
◇ El "no" en pequeñas dosis. Si no estás acostumbrada a decir "no", en los primeros intentos se te puede hacer difícil o extraño. Es normal, porque todavía no tienes la práctica como para sentirte plenamente cómoda ante este "no". Empieza por decir "no" a cosas que no sean muy importantes para ti, y ve poniéndote a prueba con cosas cada vez más significativas para ti.
¿En que nos puede ayudar poner límites?
Nos enseña a afrontar los problemas con otras personas y además nos ayuda a cuidarnos y a sentir más seguridad y confianza.
Cómo resultado mejorará nuestra autoestima y nuestras relaciones son más sanas.
“Me siento segura cuando digo que no porque algo no me apetece o interesa, me siento segura cuándo me defiendo con tranquilidad y sin atacar a las personas que creo que están traspasando mi límite”.
Deseo que estos tips os ayuden a incorporar el "no", y a utilizarlo para lograr una comunicación más asertiva con los demás y con vosotros mismos.
Irene♡